lunes, 1 de junio de 2009

Alvarez: el mercenario del Humor


En los últimos días, Carlitos Alvarez ha celebrado los años dedicados a la actuación y la comicidad.
Bien por él. Pero quiénes apreciamos su humor y arte para la imitación no podemos menos que ponernos serios cuando Carlitos quiere ponerse en plan de persona de intachable trayectoria.
La última ha sido contestar a Paolo Guerrero -que se ha molestado con razón por la maricona caracterización que le realizan- "no soy manco" "mi intención no ha sido insultarlo" vamos Carlos, eres gracioso, pero hacerte el hipócrita no te queda...

Alvarez se olvida de su pasado para hacerse el santo (o la santa, según el tabloide La Nación, que lo tíldaba de "cabro").
¿Era chiste cuando sacaba como retrasado mental al maestro César Cueto? ("Loro")
(Apenas lo cuadraron en Matute, nunca más salió el personaje que hacia su chupe Cachito, ¿no que eras bien valiente?)
Luego intentó imitar "inocentemente" a Hildebrandt (justo o casualidad cuando éste criticaba al dueño del canal donde trabaja (Baruch) bastó que César le recordara sus juicios y sus tratos con la Pinchi Pinchi y oh!!! el valiente Carlitos desapareció el personaje.

El ensañamiento con el Padre Martín, es más que evidente, que el sacerdote no se queje más, no quita lo burdo e insultante del personaje.

Entonces, pensar que sus imitaciones son simples "yo busco personajes que estén en la actualidad" suena falso, todos saben que siempre ha sido un tanto mercenario del humor, criticando a quien le convenga... economicamente.

Uno de sus primeros imitados, era Fernando Olivera, Alvarez, creó un personaje basado en un payaso para minimizarlo, pero le resultó al revés; Olivera adquirió más popularidad y Carlitos se subió al carro. Cuando Olivera caído en desgracia por su vergonzosa actuación con Toledo, Alvarez no dudó en insinuar que era drogadicto, (es broma, claro) o como decía el personaje, mientras hacia gestos con la nariz: "cloro que sí". Linda broma...

Sus símpatías fujimoristas eran más que evidentes en años pasados, siempre se comentó (o lo hizo él mismo) que guardaba silencio pues había un vídeo de él en una orgía homosexual... y lo chantajeaban con eso.

Con la caída del Fujimorismo, Carlos cayó en desgracia y en el olvido, siendo rescatado por Cecilia Valenzuela, donde se limpió y saltó nuevamente a la fama. Coincidencia o no, empezó a hacer Obras sociales, similares a las que hacía Laura Bozzo, cosa muy elogiable.

Alvarez ha anunciado su pronto retiro. Le falta aun mucho para blanquearse de su pasado. Sigue con tu tarea social para recordarte siempre como un cómico con espíritu social y no al mercenario homofóbico, pedante y golpeador de mujeres que mostraba la tv. ¡Ja ja, todo era broma!

A veces las cosas que se dicen en broma, son las más serias...